González Laya: «La reforma de la Unión Aduanera es una contribución a una EU más fuerte, sólida y segura»

González Laya: «La reforma de la Unión Aduanera es una contribución a una EU más fuerte, sólida y segura»

La ex ministra Arantxa González Laya presentó este jueves al comisario Paolo Gentiloni el informe de los sabios europeos para la reforma de la Unión Aduanera que ha coordinado. González Laya, con una larguísima carrera en el mundo del comercio internacional, aboga por una transformación total y no más parches, porque el sistema no puede resistir crisis sistémicas tal y como está concebido. Es una cuestión fiscal y de recursos, dice, pero sobre todo de seguridad. Lo que ayer parecía urgen hoy es esencial.

¿Qué les piden a ustedes con este informe?La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, en su programa cuando se presenta como candidata identifica ya la necesidad de reformar las reglas de la Unión Aduanera para que sean capaces de proteger al ciudadano y al empresario. A partir de esa premisa, el comisario Paolo Gentiloni en septiembre del año pasado nos dice que hay unos grandes cambios económicos y comerciales a los que la UE tiene que dar respuesta y nos pide que pongamos sobre la mesa una visión sobre cómo podemos responder. Es un momento muy importante para reforzar la protección de las fronteras externas de la UE. Si ayer era importante, tras la invasión rusa es esencial. ¿Cuáles son esos cambios y desafíos? La explosión del comercio electrónico, que supone millones de paquetes que llegan a la UE, y hay que verificar que no contienen productos no conformes con las reglas. Segundo, una explosión de la reglamentación para asegurarnos de que los productos, todos, responden a criterios de sostenibilidad, seguridad, salud, trabajo decente, condiciones laborales decentes… y eso lo tienen que controlar las aduanas cuando son bienes importados. Y nos piden propuestas también sobre cómo mejorar la gobernanza de la Unión Aduanera, porque la legislación es competencia comunitaria, pero la aplicación es de cada país y eso ha dado como resultado que la UE no tiene una frontera exterior, tiene 27. Nuestro objetivo es ver qué podemos hacer para que las aduanas trabajen como una, no como 27. Se ha dicho siempre que la Unión Aduanera funcionaba bien, que resistió al Brexit y a la pandemia. ¿Necesita ahora un ajuste, una reforma o una transformación de arriba abajo?Las aduanas han respondido a los dos grandes choques de los últimos cinco años, el Brexit y el Covid, pero lo han hecho con mucho esfuerzo. El sistema no será capaz de gestionar crisis de esa magnitud si siguen ocurriendo. En la última década ha habido reformas puntuales, pero no acompasadas con los cambios en el comercio y la economía. Tenemos la necesidad de una reforma sistémica, no un parche pequeño. Una sistémica que permita tener los instrumentos para responder a estos desafíos, al que se suma ahora una guerra con una batería de sanciones impuestas sobre Rusia que deben ser controladas en importaciones y exportaciones. No se trata de pedir buena voluntad a los aduaneros, que ya han demostrado. Hay que dotarles de un sistema que permita enfrentarse al futuro con los instrumentos necesarios. ¿Cuáles son los ejes de su propuesta?En primer lugar, hay que pasar de un sistema en el que se trabaja sobre transacciones individuales a uno en el que el centro sean los operadores económicos. Que no se verifiquen transacciones, sino que se controlen operadores. Eso quiere decir crear tres categorías de operadores. El primero, los que son muy conocidos, a los que les damos toda nuestra confianza sobre la información que nos transmiten y a los que les damos un ‘fast track’, una vía preferente, para pasar por las aduanas. Facilitamos los trámites a cambio de que nos den toda la información necesaria y nos generen confianza. Una segunda categoría de operadores a los que conocemos menos o nada y nos fiamos menos, y por tanto el carril será más lento. Y un tercero para individuos, pequeñas operaciones. Facilidad a cambio de confianza. ¿Quiénes son los operadores más conocidos? Sobre todo las plataformas de comercio online, que tendrán facilidades a cambio de que sean responsables, mucho más que hoy, de ese comercio. Ahora dicen que no saben lo que se comercia en sus plataformas, y nosotros ofrecemos velocidad a cambio de esa labor de control sobre los productos que se ponen a la venta. Y que sean criterios exigidos por Europa. Pueden ser plataformas, grandes empresas, medianas incluso. Cuanto mayor sea el número de operadores en los que confiamos más vamos a facilitar la tarea y más información tendremos para gestionar los riesgos a nivel europeo. Su informe dice que no hay datos fiablesNo tenemos datos de calidad. Las transacciones cuando se declaran se hacen sobre información declarativa y lo que decimos es que hay que pasar de eso a datos comerciales: facturas, precios. Obtenidos de las plataformas, de operadores de logística, de los medios de pago, de las aseguradoras. Una revolución total en los datos que permitan digitalizar las aduanas en línea de las prioridades comunitarias, que se reduzcan los trámites y que nos permitan gestionar riesgos. De transacciones a operadores, de declaraciones a información comercial, pasar de 27 fronteras a una. Y crear una Agencia de Aduanas a nivel europeo, encargada de que las 27 autoridades de los Estados Miembro trabajen como si fueran una. No queremos que haya un cuerpo de aduaneros europeos, no nos parece necesario, pero sí un único sistema informático, una ventanilla única para trámites, que los datos se puedan explotar a nivel conjunto, que se hagan compras conjuntas, que la formación sea la misma. Que la protección no la determine el eslabón más débil, sino que subamos al mismo nivel independientemente de por dónde entre una mercancía. En la práctica hay un margen de discrecionalidad nacional en las prácticas y sanciones que no les gustaLa información recogida tras muchas horas de conversaciones con los operadores nos dice que el 95% de los productos químicos importados a la UE no cumplen con la directiva. La OLAF nos da información preciosa sobre las mascarillas que no cumplían con los requisitos comunitarios, los hidroalcoholes, los cigarrillos fraudulentos que se decomisan en el mercado comunitario. Todavía hay un gran nivel de entrada de productos que no cumplen. Lo dice la Asociación Europea de Consumidores, la Oficina Antifraude de la UE, el Tribunal de Cuentas, la Asociación de Productores Químicos. Es algo muy serio. La frontera debe de ser capaz de parar la entrada de productos irregulares. ¿El mayor riesgo que ven ustedes es de impuestos, fraude fiscal, medio ambiente, seguridad? Hay dos dimensiones. La de impuestos es clara, porque las aduanas son responsables de 83.000 millones de euros en derechos e IVA sobre las importaciones que ellas recogen cada año. Y una gran parte va al Presupuesto de la UE. Sabemos que hay muchísimas instancias en las que se infravalora la mercancía declarada en frontera y se está detrayendo al fisco europeo de recursos valiosos. Sólo conocemos el fraude que se investiga y por eso pedimos un informe anual de cuánto se deja de percibir, como se hace con el IVA. Necesitamos una recaudación fiscal justa y sin fraudes. Necesitamos esos recursos para la recuperación económica, la reconstrucción de Ucrania y las políticas comunitarias. Y luego está la seguridad Exactamente. Es algo de pura seguridad para el consumidor y el ciudadano. Salubridad, protección del medio ambiente, de los derechos laborales. Protección para el contribuyente y el productor comunitario, que se enfrenta a una competencia desleal su permitimos que entren productos que no cumplen con la normativa que a ellos sí se les exige. Ustedes quieren que se haga de forma inmediataLo que sugerimos es que la comisión ponga sobre la mesa un paquete legislativo a finales de este año y que comience un proceso en paralelo son reformas que ya se pueden ir haciendo, como la creación de una Agencia Europea de Aduanas. Y que la tarea se termine en 2030 pero empiece este 2022. Es urgente porque está en juego una necesidad geopolítica europea. La reforma de la Unión Aduanera es una contribución a una EU más fuerte, sólida y segura. ¿Tiene estimación de impacto si se aplicaran sus recomendaciones?Es difícil de calcular porque no sabemos lo que se deja de percibir. Es un problema grande y por eso pedimos un informe y una metodología clara. Sabemos por ejemplo que si se elimina la exención para la importación de comercio electrónico de productos de menos de 150 euros, que hoy no tienen que pagar derechos de aduana, se recaudarían 1.500 millones de euros adicionales. Antes tampoco pagaban IVA pero hace año y medio se eliminó esa exención y sugerimos lo mismo para esos paquetes, porque lo que está ocurriendo es que es un incentivo a defraudar. Se declara como es valor mercancías que tienen más y se favorece la división de compras en paquetes pequeños, lo que aumentan la huella de carbono del comercio electrónico.