El misterioso silencio de los pilotos minutos antes del accidente del avión en China

Asia El extraño accidente del Boeing 737 estrellado en China

El centro de control de área de Guangzhou no ha recibido ningún «mayday» o informes de anomalías a bordo de los pilotos del Boeing 737-800 de China Eastern Airlines que se estrelló el 21 de marzo cerca de Wuzhou con 132 personas a bordo. Y cuando intentaron contactar con el comandante y primer oficial desde tierra «varias veces» para entender por qué el avión había descendido -sin previo aviso y autorización-, nadie respondió nunca. Unos segundos después, la señal desapareció del radar mientras el avión avanzaba a 696 kilómetros por hora.

Es un detalle que hace aún más misterioso lo ocurrido con el avión que partió de Kunming y se dirigía a Guangzhou. Pero eso, al mismo tiempo, según algunos expertos en seguridad aérea, acota las posibles causas del accidente, a la espera de encontrar y estudiar los registros de las dos cajas negras, los únicos dispositivos que pueden proporcionar información clave. De momento, los equipos de búsqueda han recuperado una de las cajas negras del avión de China Eastern.

Porque interpretando los pocos datos disponibles -velocidad, altitud de crucero, dinámica de descenso, boletines meteorológicos- se excluye la explosión o un problema técnico «tradicional».

Pero cada vez se refuerza más el defecto tan grave como para haber comprometido el funcionamiento de los controles de vuelo más básicos o el gesto voluntario de alguien que maniobraba el avión.

Los expertos, como siempre en estos casos, son muy cautelosos. Pero hay alguien que, en conversaciones privadas, subraya cómo el Boeing 737-800 es muy seguro y no tiende a descender tanto, casi verticalmente, a menos que haya algo que «obligue» a mantener el morro hacia abajo como un bloqueo mecánico o una maniobra del piloto.

Por ello, cada vez se cita más el caso del vuelo 185 de Silk Air, con un Boeing 737-300 y 104 personas a bordo, que se estrelló en el trayecto de Yakarta, Indonesia, a Singapur el 19 de diciembre de 1997.

Cayó en 32 segundos, según el informe final de la investigación que establece que la causa es atribuible al gesto deliberado del Comandante Tsu Way Ming.

Los expertos cruzan en estas horas los datos de los últimos tres minutos de ese vuelo con los últimos 180 segundos del de China Eastern, señalando la fuerte similitud en los movimientos finales de ambas aeronaves.

El Boeing 737-800 de China Eastern despegó a las 13:16 hora local (6:16 GMT) del aeropuerto de Kunming, según la Autoridad de Aviación Civil de China. A las 14.17 ingresó en la «Región de Información de Vuelo» de Guangzhou, que era su destino final, a 9.144 metros sobre el nivel del mar. Pero tres minutos después la aeronave perdió altitud sin previo aviso y sin obtener autorización del centro de control de área.

Una azafata, al notar la importante reducción de altitud, llamó varias veces a la tripulación sin obtener respuesta. Cuarenta segundos antes del choque, sin embargo, el avión se habçia recuperado ligeramente, un elemento que hace aún más curiosa la dinámica según los expertos. Pero a las 14.23 el radar dejó de recibir señales del avión .

Por ello, el descubrimiento de las cajas negras (que en realidad son naranjas) se vuelve fundamental para entender la dinámica real.

Una de las cajas, en particular, se busca con atención: la «Cockpit voice recorder», la grabadora de audio que archiva las conversaciones en cabina.

El otro dispositivo, «Registrador de datos de vuelo», almacena todos los valores posibles de la aeronave. Pero la búsqueda no será nada fácil. Zhu Tao, director del departamento de seguridad aérea de la agencia de aviación civil china, dijo durante una conferencia de prensa que «el avión está destruido y la investigación será muy complicada».

Agregó que «con la información disponible actualmente es imposible entender las causas del accidente».

El avión cumplía con todos los documentos y controles requeridos y transportaba a 132 personas en total: 123 eran pasajeros, ninguno extranjero según el organismo de aviación civil chino.

Había tres pilotos, 5 asistentes de vuelo a los que se agregó un «oficial de seguridad» no identificado.

El Boeing 737-800 de China Eastern comenzó a volar con librea asiática el 22 de junio de 2015 y había realizado 8.986 despegues para un total de 18.239 horas de servicio en el momento del accidente .